Hay veces que cuando un cliente se pone en contacto con nosotros para que le presupuestemos la reforma integral de su piso y vamos a visitar la vivienda para poder valorar el presupuesto, nos quedamos asombrados de las posibilidades que tiene. Eso nos pasó desde el primer momento con este ático. Lugares singulares que merecen un trato especial.
Abordamos la reforma integral de este ático dúplex situado en el corazón del Casco Histórico de Zaragoza con la firme intención de sacar a la luz lo mejor que guardaban sus paredes, combinándolo con diversos materiales recuperados y nuevos materiales nobles para hacer de ella, una vivienda mucho más confortable.
Nada más entrar a la vivienda, resalta sobre el conjunto una de las señas de identidad de este piso, una pared con ladrillo antiguo recuperado que atraviesa las dos plantas de la vivienda. Permanecía oculta tras unos tabiques y tras una minuciosa restauración utilizando mortero de cal, ha vuelto a tener protagonismo.
Otro punto de la casa que llama la atención en la planta superior es la barandilla que hemos construido con hierro y cristal. Gracias a su diseño y sencillez nos ha permitido integrar las dos plantas, facilitando la visión entre ambas.
Para los cerramientos de la cocina y el vestidor hemos utilizado unas antiguas puertas metálicas olvidadas. Las hemos recuperado y adaptado para un nuevo uso como puertas correderas, quedando perfectamente integradas.
En el suelo de la cocina hemos optado por un bonito suelo hidráulico recuperado.
Para la construcción del vestidor hemos combinado muebles de madera con antiguas baldas metálicas industriales que hemos recuperado.
Una duda recurrente que suelen tener nuestros clientes son los cabeceros de las camas. En esta ocasión hemos construido un cabecero con tablas de madera recuperadas y placas de arcilla ecológica, rematando el conjunto con diferentes tonos de morteros de arcillas naturales sin aditivos.
El capítulo de eficiencia energética también ha sido decisivo en la ejecución de las obras. Por un lado hemos cambiado las antiguas ventanas por ventanas de PVC con triple junta y sistema de 6 cámaras. Además, se han instalado en las ventanas vidrios laminados con doble acristalamiento y bajo emisivos. Por otro lado, hemos cambiado el obsoleto sistema de calefacción eléctrica que había en el piso por un sistema de calefacción con gas, con una caldera eficiente y nuevos radiadores.
Como remate a las obras, hemos pintado todos los techos de madera con un tinte blanco ecológico. Además, también se han pintado las paredes con pintura blanca ecológica.
Tras la intervención, la vivienda ha ganado luminosidad y confortabilidad.
Al final, el resultado habla por si mismo.
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Fotografía Daniel Becerril.
15 julio, 2019
Decoración, Reforma